Mitos y realidades sobre la atención virtual

El uso de la atención virtual aumentó drásticamente durante la pandemia de COVID-19. Muchos pacientes eligieron los servicios de telesalud gracias a su seguridad, conveniencia y precio económico. El uso de la telesalud entre los pacientes se disparó del 11 % en 2019 al 46 % en mayo de 2020, según un estudio de McKinsey & Company.

Estos recursos virtuales siguen estando disponibles en todo el país, incluso cuando las tasas de vacunación están aumentando y las restricciones de la pandemia se han reducido. A medida que este modelo relativamente nuevo del cuidado de la salud crece en los Estados Unidos, también lo hacen los conceptos erróneos sobre la atención virtual.

UPMC le ofrece varias formas convenientes de obtener atención virtual. Descubra algunos datos que desmienten los mitos sobre la atención virtual, que le ayudarán a tomar decisiones más informadas sobre su salud.

Mito: La atención virtual es de menor calidad.

Realidad: Una encuesta sobre el impacto de la telesalud en 2020, en la que participaron más de 1,000 profesionales de la salud, empresas y organizaciones sin fines de lucro, reveló que el 60 % de los encuestados cree que la telesalud mejora la salud de los pacientes. Otro 68 % declaró que tenía previsto aumentar las opciones de videoconsultas en sus centros.

Los principales retos de la atención virtual, según los encuestados, son las barreras tecnológicas de los pacientes y el acceso a internet.

Según un estudio de 2015 de la American Hospital Association, los servicios de telemedicina utilizados por el programa de atención posterior a un paro cardiaco de la Veterans Health Administration (VHA) contribuyeron a disminuir las hospitalizaciones por insuficiencia cardiaca en un 51 % y a disminuir los reingresos por otras enfermedades en un 44 %.

Gracias a la comodidad de la telesalud, es más probable que los pacientes concierten citas con su médico para los cuidados posteriores.

La telesalud amplía la atención médica a poblaciones más vulnerables y a personas con discapacidades, sin sacrificar la calidad. De esta manera, las poblaciones vulnerables, como las personas de color, las que no tienen una vivienda estable y las que tienen deficiencias visuales o auditivas tienen la posibilidad de hablar con un proveedor de la salud sin tener que desplazarse.

Este acceso más amplio no solo conduce a mejorar la salud de la comunidad en general, sino que también permite a los trabajadores con poca disponibilidad de tiempo y a los padres tener acceso a la atención médica desde la comodidad de su hogar.

Además, los costos de la atención virtual son a veces más bajos que los de las visitas presenciales. Los pacientes no solo se ahorran los gastos de desplazamiento, estacionamiento y guarderías, sino que los proveedores pueden cobrar menos por las consultas virtuales.

Mito: La atención virtual terminará cuando acabe la
pandemia.

Realidad: Aunque la atención virtual creció por necesidad durante la COVID-19, estudios recientes sugieren que a los pacientes les gustaría que aumentara en los próximos años.

Una encuesta de consumidores de McKinsey de julio de 2021 reveló que el 40 % de los consumidores encuestados dijo que seguiría utilizando la telesalud más allá de la pandemia. Muchos pacientes ven la telesalud como una parte importante de su atención médica, incluidos los servicios de salud mental.

Particularmente, la percepción sobre la seguridad de la tecnología está cambiando a medida que los estadounidenses se sienten más cómodos con los tratamientos modernos. Es importante recordar que las citas de telemedicina están sujetas a las mismas protecciones de privacidad que las visitas en persona y, en UPMC, su información está protegida a través de equipos de video de última generación y su portal del paciente de UPMC.

Mito: Los exámenes físicos son necesarios para todos los
diagnósticos y prescripciones.

Realidad: Aunque algunas afecciones requieren el cuidado directo de un especialista, muchos proveedores pueden diagnosticar enfermedades basándose en sus síntomas, historial médico y necesidades.

Desde sarpullidos hasta infecciones de los senos nasales, los médicos están autorizados a recetar y aconsejar virtualmente, tal y como lo harían en una clínica.

Mito: Solo las afecciones menores se tratan de forma
virtual.

Realidad: Muchos de nuestros proveedores de atención primaria y especialistas ofrecen citas de videoconsulta a través de nuestro portal para pacientes. Todo lo que necesita es un smartphone o una tablet, la aplicación MyUPMC o la UPMC Central Pa. Portal app, y programar una cita de videoconsulta con su proveedor de UPMC.

UPMC Telemedicine también ofrece a los pacientes la oportunidad de reducir las visitas en persona para el dolor crónico, cuidados intensivos las 24 horas, pediatría, enfermedades hormonales, salud cardiaca y pulmonar, salud mental e incluso, la atención de los ictus. Por ejemplo, el servicio de telemedicina, Telestroke Services, ofrece evaluaciones y tratamientos las 24 horas del día para pacientes con ictus agudos.

Entre las afecciones que pueden tratarse virtualmente en UPMC están los resfriados, las infecciones del tracto urinario y las afecciones de la piel. Las personas que necesitan ayuda para perder peso, dejar de fumar o dormir mejor también pueden encontrar apoyo a través de las video consultas.

Para más información sobre los servicios de telemedicina de clase mundial de UPMC, visite www.upmc.com/patients-visitors/telemedicine-services. Puede encontrar más información sobre las videoconsultas de UPMC aquí.

Acerca de UPMC

Con sede en Pittsburgh, UPMC es un proveedor de atención médica y aseguradora de renombre mundial. Operamos 40 hospitales y 700 consultorios médicos y centros ambulatorios. Estos están ubicados en el centro y el oeste de Pensilvania, Maryland, Nueva York y a nivel internacional. Empleamos a 4,900 médicos. Somos líderes en atención clínica, investigación innovadora y tratamientos de última generación. U.S. News & World Report clasifica constantemente a UPMC Presbyterian Shadyside como uno de los mejores hospitales del país en muchas especialidades. Además, clasifica al UPMC Children’s Hospital of Pittsburgh en su Cuadro de Honor de los Mejores Hospitales Infantiles de Estados Unidos.