No puedo parar: dejar de fumar tras un diagnóstico de cáncer

Puede parecer increíble para alguien que no fuma, pero encender un cigarrillo después de un diagnóstico de cáncer es más común de lo que se piensa.

De hecho, según un estudio reciente, casi el 10 % de los pacientes con cáncer siguen fumando años después de su diagnóstico, y la mayoría de ellos lo hace a diario. Las personas que han padecido cáncer de vejiga, ovarios y pulmones son aún más propensas a seguir fumando. En general, los supervivientes de cáncer que fumaban encienden una media de 15 cigarrillos al día.

Eso es preocupante, porque fumar no solo es peligrosamente insalubre, sino que también puede hacer que tenga menos probabilidades de responder a su tratamiento contra el cáncer. He aquí cuatro buenas razones por las que es hora de que los supervivientes de cáncer dejen de fumar para siempre.

“El diagnóstico de cáncer es un gran momento para dejar de fumar, ya que puede aumentar las tasas de supervivencia y reducir la posibilidad de complicaciones en el tratamiento del cáncer y mejorar significativamente la calidad de vida”, dice Lanie K. Francis, MD, oncólogo médico y director del programa en el Wellness and Integrative Oncology Program en UPMC Hillman Cancer Center.

Obtenga más información visitando el sitio web de cesación de fumar del UPMC

Por qué debe dejar de fumar tras un diagnóstico de cáncer

Dejar de fumar reduce la probabilidad de reincidencia del cáncer

Fumar no solo aumenta las probabilidades de que reaparezca el cáncer de pulmón. También puede aumentar el riesgo de que reaparezcan otros tipos de cáncer, como los de laringe, garganta, boca, riñón, vejiga, hígado y páncreas.

Fumar puede causar problemas crónicos de salud

Aunque haya vencido al cáncer, el tabaco le hace vulnerable a otras enfermedades crónicas, desde las cardiovasculares a la diabetes.

Fumar limita la eficacia de su tratamiento contra el cáncer

Fumar puede alterar el modo en que el organismo procesa los fármacos de la quimioterapia y aumenta las probabilidades de desarrollar complicaciones derivadas de este tratamiento contra el cáncer.

“Fumar durante el tratamiento del cáncer puede aumentar los efectos secundarios tóxicos de la quimioterapia y disminuir su tasa de respuesta a la quimioterapia y la radioterapia”, afirma el Dr. Francis.

Fumar puede empeorar los efectos secundarios del tratamiento

El tratamiento del cáncer puede ser duro para el organismo, incluso si está sano. Fumar empeora los efectos secundarios (como la fatiga, las náuseas, la caída del cabello y el dolor), incluso meses después de terminar el tratamiento.

Consejos para dejar de fumar

Es una prueba contundente de la importancia de dejar el tabaco. Pero para muchas personas es más fácil decirlo que hacerlo.

“Aunque el diagnóstico de cáncer es un momento estresante, muchos pacientes quieren y pueden dejar de fumar con herramientas como el sustituto de nicotina y el apoyo de su equipo médico”, dice el Dr. Francis.

El primer paso es fijar una fecha para dejar de fumar y cumplirla. Recuerde que no existe un método único para dejar de fumar. Según su estilo de vida y personalidad, unos métodos pueden ser más eficaces que otros.

Algunas opciones son dejar de fumar de golpe, reducir el número de cigarrillos diarios durante un periodo determinado, utilizar productos para dejar de fumar y buscar ayuda profesional. Su médico puede darle más información sobre los mejores métodos para dejar de fumar.

Conozca más visitando el sitio web de cesación de fumar del UPMC.

Acerca de UPMC Hillman Cancer Center

UPMC Hillman Cancer Center brinda atención oncológica de primer nivel, desde el diagnóstico hasta el tratamiento, para ayudarlo en su batalla contra el cáncer. Somos el único centro oncológico integral en nuestra región, según el Instituto Nacional del Cáncer. Tenemos más de 70 ubicaciones en Pensilvania, Ohio, Nueva York y Maryland, con más de 200 oncólogos. Nuestro equipo de investigación de renombre internacional se esfuerza por encontrar nuevos avances en prevención, detección y tratamiento.